lunes, 28 de noviembre de 2011

Querido chico de 14: Cuando yo era chica mis hermanos mayores iban a lo que llamaban "Centro Juvenil" y siempre me dio intriga saber lo que era. Entré a primer año del secundario y unas personitas, algunas conocidas otras no, nos vinieron a invitar a la apertura del Centro Juvenil y a formar parte del grupo de 13. Intrigada fui a la apertura donde hicimos varios juegos con muchos grupos de personas y de edades mezcladas. Al ser nueva en el Pío no conocía a muchos, pero eso no prohibió que me re divirtiera y empezara a formar parte del grupo de 13 y del Centro Juvenil. Mis animadores de ese año fueron Pame y Nery, quienes hicieron que todos los viernes la pasara genial y me dieran más ganas de seguir en el Centro. Con canciones, juegos, alguna que otra reflexión se pasó ese año donde decidí seguir yendo porque me encantaba la propuesta. Entonces, llegó 14. Me sentía más grande, ya no era la más chica del Centro. Ese año formamos un grupo hermoso con quienes pudimos compartir un montón de cosas. En 14 empezamos a tener menos juegos y más actividades para "reflexionar". Fue un año increíble que lo pude compartir con mis animadores: Sabri, la rubia y Pablito. Pude pensar en mí misma y llegué a conocerme más. También empezamos con el tema del SERVICIO, pensar en el otro en situaciones difíciles. Yo creo que 14 fue un año muy distinto a 13, hicimos un hermoso grupo. Pasado el año, llegué a 15. Wooo! Ya estaba en mi último año en el "Centro Juvenil". Fue un año un poco complicado porque tuvimos un par de conflictos con el tema del grupo. Pero eso no impidió que yo siguiera yendo al Centro. Tuvimos actividades muy particulares e interesantes. El tema del SERVICIO fue el más fuerte en este año. Empezamos a mirar al exterior con otros ojos, comenzamos a ver con más atención a la sociedad. Mis animadores son: Pablito (nuevamente) y Cami (mi hermana), y los referentes son Pancho y Pame. Cuando comenzó la segunda parte del año, empezamos a plantear el tema de los apostolados donde por fin íbamos a poder brindar todo lo que aprendimos en esos 3 interesantes años. Como eramos bastantes nos dividimos en 2 grupos. Yo, primero fui a "Faremo Metá" que es un apoyo escolar. Fue una experiencia genial. Poder ver a los nenes que les cuestan las materias pero se re esfuerzan y que te miraban con una sonrisa de oreja a oreja me partió el alma. El otro apostolado que hice fue "Noche de Caridad" con el Grupo de 16. Salimos a la calle y nos dividimos por veredas. Nos acercábamos a las personas de la calle o cartoneros con la excusa de darles algo para comer y para tomar, pero era mucho más que eso. Era poder tener una charla con esas personas y que sientan que alguien los escucha. Definitivamente fue una experiencia inolvidable. Yo, te recomiendo que sigas y que disfrutes a mil el Centro. Es un espacio donde siempre te van a recibir bien. Disfrutá del servicio al otro. Yo, personalmente salgo muy bien conmigo misma después de una tarde en el Centro Juvenil y del SERVICIO. Disfrutá mucho de 15.


Centro a la cabeza. Centro al corazón. Centro en compartir. En el Pío nuestro
Centro Juvenil.

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