lunes, 18 de junio de 2012

Dejá de mirarme así, porque ya me estás confundiendo mucho. No quiero que me pase nada con vos, pero si cada día me lo haces más difícil me va a costar mucho. Cada vez que te miro, vos me estás mirando y esas conexiones son interminables. Ninguno de los dos puede alejar la mirada, nos hipnotizamos el uno del otro. Me acuerdo de esa tarde en que por fin pudimos hablar.. ¡Qué raro que fue! pero a la vez, qué lindo. Me gustó tanto haber conversado con vos, aunque en su momento me pareció muy extraño. Me miraste con esa sonrisa que me mataba el corazón, me paralizaba y me hacía temblar. ¿Qué será lo que siento? Me da miedo descubrirlo. Pero aún así, no puedo negar que me encanta mirarte. No sé si hago bien o no, pero todavía quiero mantenerme distante y tratar de revelar mis pensamientos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario