Todo lo que te hace mal a la mierda, hay que vivir lo que queda de tu vida. Nadie sabe cuándo vas a pasar al otro lado, pero hay que pensar en positivo, y vivir todos los días como si fuera tu último día de vida. No tiene que importar nada pero nada lo que piensen los demás.

martes, 30 de octubre de 2012
lunes, 29 de octubre de 2012
No, que no te quede duda que siempre defenderé lo que soy. No cambiaré y así me vas a conocer. Pero por más que intento convencerlos que no, más me convenzo a mí misma que sí. Ser feliz, porque es lo mejor que sé hacer, sé sentir, ser feliz porque sabré esperar, ser feliz porque esta noche no habrá insomnio, porque despertaré y sabré que el día será mejor que ayer, ser feliz porque todo saldrá bien y voy a disfrutar de lo que me pasa.
Ese brillo en los ojos no lo tenía desde hace tiempo, esa sonrisa diferente, esas ganas de levantarme e ir por todo. Una vez más, la teoría funciona, quizá es ya una ley: todo mejora al final y comienza algo nuevo.
No quiero regresos y antes de que lo hagan yo me habré ido. Y aunque lo sé, es más difícil alejarse, decir adiós...
domingo, 28 de octubre de 2012
Era algo que los dos sabíamos que estaba ahí, que no era nada del otro mundo pero era imposible dejarlo atrás. Era algo que ninguno nos atrevíamos a decir, algo que nadie sabe... pero nosotros lo sentíamos dentro tan fuerte, que duele. Era pensar en el qué pasaría, que haríamos después, ¿qué pensaría de mí? intentar actuar como sabés que a él le gustaría pero después pensás "no se pueden tener más tonterías". Me jugué al destino, traté ser fuerte. La realidad pasó y no me di cuenta. Todavía siento sus labios sobre los míos. Recuerdo las palabras que me decía al oído. Sus abrazos, sus caricias. No estoy arrepentida de nada. Espero que todo quede en aquella noche, que haya sido sólo un juego del momento.
sábado, 20 de octubre de 2012

miércoles, 10 de octubre de 2012
jueves, 4 de octubre de 2012
La llama se apagó, no sé. Matamos la ilusión, tal vez. ¿Y dónde quedo yo? En este mundo sin color, sin historias que contarte, sin saber como explicarte. Que hoy te veo y aunque lo intente no se me olvida, que eras tú el que no creía en las despedidas. Que sigo siendo la misma loca que entre tus sábanas se perdía. Y a fin de cuantas no soy distinta a aquella idiota que te quería. No importa cómo fue, ni quién. Queríamos beber sin sed. ¿Y dónde quedo yo? En este mundo sin tu voz, ignorando las señales que me llevan a encontrarte. Que hoy te veo y aunque lo intente no se me olvida, que eras tú el que no creía en las despedidas. Que sigo siendo la misma loca que entre tus sábanas se perdía. Y a fin de cuentas no soy distinta a aquella idiota que te quería. Que todavía espera verte sonreír. Que todavía espera verse junto a ti. Que sigo siendo la misma loca que entre tus sábanas se perdía. Y a fin de cuentas no soy distinta a aquella idiota que te quería.
martes, 2 de octubre de 2012

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